martes, 13 de enero de 2009

Su espíritu quiere nacer ya


En ocasiones, el alma de un muerto es tan maligna que tiene prohibida la entrada en el cielo y sólo le queda errar eterna y desesperadamente entre los dos mundos mientras busca un nuevo cuerpo en el que introducirse. Y puede que lo consiga... El guionista y director David S. Goyer (Blade: Trinity; The Invisible/Lo que no se ve, Batman Begins, El caballero oscuro) y el productor Michael Bay (Transformers, La matanza de Texas (2004), Armageddon) nos enseñan un lado aterrador de los no muertos en La Semilla del Mal, un thriller sobrenatural que cuenta la historia de una joven envuelta en un mundo de pesadillas cuando un espíritu demoníaco amenaza a sus seres amados. La Semilla del Mal empieza y acaba con Casey, una joven y atractiva universitaria que empieza a tener extrañas visiones de manifestaciones físicas, producto de una maldición, por lo que decide investigar la historia de su familia. David Goyer la veía como una joven inteligente, estudiosa y bastante solitaria que nunca había conseguido superar el dolor causado por el supuesto suicidio de su madre cuando era una niña.
En vez de imaginar el personaje y construir la trama a su alrededor, el guionista creó a Casey como un producto natural de los acontecimientos y la ambientación de la historia: “Me parece que hay dos clases de guionistas: los que construyen la historia a partir de unos personajes, y los que construyen los personajes a partir de la historia. Yo pertenezco a los segundos”. Laura Tena.